En los últimos veranos hemos podido experimentar cómo las temperaturas constantemente son más elevadas en comparación al año anterior, además de como en los otoños e inviernos las inundaciones son cada vez más frecuentes a causa de intensas y esporádicas lluvias.
Para que se origine un incendio forestal se requiere principalmente de tres elementos: oxígeno, calor y combustible, y obviamente de fuego, sin embargo, hay un quinto elemento del que no se suele hablar, y si bien este no genera las inmensas llamas que arrasan con todo a su paso, sí favorece que estas se originen y sean cada vez más difíciles de apagar: con este nuevo impulsor de los incendios forestales nos referimos al Cambio Climático.
Te propongo una reflexión, miremos lo que hay a nuestro alrededor como si fuese la primera vez que lo percibimos, intentemos olvidarnos de todo lo que hemos aprendido en nuestro colegio hasta el momento, ¿cómo interpretamos lo que vemos? ¿Acaso no percibimos como el sol y la luna giran en torno a nosotros mismos y a nuestro planeta? ¿No nos parece que la tierra bajo nuestros pies está totalmente inmóvil? ¿Que tal superficie es esencialmente plana y su horizonte no parece tener fin? ¿Podemos siquiera percibir que la temperatura global de nuestro planeta está aumentando cada año?
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