En la Antártica también hay terremotos

DATOS BÁSICOS

INTRODUCCIÓN

¿Sabías que en la Antártica hay niñas y niños como tú que también van a la escuela? La Villa Las Estrellas es un poblado de 41 habitantes, repartidos en 14 viviendas, ubicado en la base chilena Presidente Eduardo Frei en pleno continente Antártico. El poblado cuenta con escuela, oficina de correos, banco, biblioteca, iglesia y un hospital para personal que cumple funciones militares, científicas o de servicio que residen allí junto a sus familias¹. Este poblado y el Fortín Sargento Cabral de la Base Esperanza de Argentina, son los únicos asentamientos civiles en todo el continente¹. Allí, llevan su vida entre ventiscas de nieve que no permiten ver más allá de un metro de distancia, temperaturas de 35 grados bajo cero en invierno, mares congelados que frenan el paso de los barcos y aviones que apenas traen suministros una vez al mes¹. Por ello, cada año los habitantes del poblado, no así los de la base, aprovechan de regresar al continente para disfrutar de los meses de verano austral. Y además poseen actividades como la gran fiesta de disfraces de solsticio de invierno que se lleva a cabo el 21 de junio y en la que participan habitantes de todas las bases.

En este contexto, hoy queremos preguntarnos: ¿qué características tienen en común nuestro territorio y la Antártica? Esto con el objetivo de comparar tu estilo de vida con el de este frío lugar, mediante una breve investigación de las costumbres del sector, distinguiendo así distintas formas de adaptación y transformación de la población a su ambiente natural.

DESARROLLO DE LA ACTIVIDAD

El pueblo cuenta con tan sólo dos profesores que imparten clases de primaria en un centro donde los entre 5 y 15 niños y niñas que asisten al año disponen de computadoras y conexión de internet. O al menos así era hasta 2018, año en que la escuela debió cerrar sus puertas por malas condiciones en la base². En este momento, no hay niños en la Antártica, pero sí lo hubo durante 33 años, y posiblemente los volverá a haber pronto. 

Estos niños viven en situaciones muy similares a tí pero cubiertos de nieve. Y algo más que también tienen en común que quizás no sabías, es que allá también ocurren terremotos. Quizás pensabas que el único desastre de origen natural posible en la Antártica eran las bien conocidas avalanchas, o tal vez creías que los únicos temblores posibles eran debido a derrumbes de hielo. No obstante, debemos recordar que la Antártica a diferencia del Ártico, es un continente. De hecho está sobre la placa tectónica más extensa del mundo, la Placa Antártica. Y, por lo tanto, es un lugar propenso a vivir los mismos movimientos telúricos que nosotros.

El extremo aislamiento invernal al que se someten los habitantes del poblado ubicado a 1500 km de la ciudad de Punta Arenas, les ha llevado a sortear eventos que en sus condiciones resultan especialmente difíciles. Esto es, han debido adaptarse a los efectos distintivos que posee un terremoto y tsunami en el sector. La geografía del sector está sometida a significativos cambios para las comunidades según la temperatura de la temporada. Por ejemplo, al bajar las temperaturas una masa de agua puede congelarse y convertirse en un puente, convirtiendo islas en penínsulas y conectando de este modo zonas de mayor riesgo con zonas seguras. Pero, en caso de emergencia, ¿cómo evacuar de un lugar en riesgo si por el alza de temperaturas tu puente se ha derretido? La respuesta se encuentra en el vídeo presentado a continuación.

ACTIVIDAD

Escribir un relato de tus actividades diarias, desde que te levantas hasta que te acuestas, pensando en un día habitual. Luego, como curso armar un cronograma general con las actividades comunes de los relatos. Ahora, teniendo a mano este cronograma, nos preguntaremos: ¿qué actividades de tu día a día se verían dificultadas si vivieras en la Antártica? Específicamente:

• Pedir individualmente que cada estudiante realice un cronograma de sus actividades más relevantes en un día común, desde que se despierta hasta que se acuesta
• En conjunto, armar un cronograma con las actividades que más se hayan repetido o la que les parezcan más comunes
• Ir viendo una a una cómo serían esas actividades si viviéramos en la Antártica. Se comentan como curso pero cada estudiante debe entregar una respuesta en el cuaderno
• Para complementar sus respuestas, se sugiere visualizar el siguiente video
• Luego de ver el video, se sugiere acompañar la reflexión con algunas preguntas tales como:
  • ¿A quién apodan “El Pingüino”?
  • ¿Por qué cerró sus puertas la escuela F-50? ¿Hay otra escuela en el continente?
  • ¿Cuál es la dificultad para transportar el agua potable en la Antártica? ¿De qué formas se puede conseguir agua?
  • ¿Por qué las personas deben someterse a una operación antes de viajar?
  • ¿Qué otras estrategias de supervivencia te llamaron la atención del lugar?

Se sugiere presentar las preguntas antes del video para que guíen la atención de las y los estudiantes durante su visualización, ya que dura cerca de 9 minutos. La importancia para la reflexión final debe estar puesta en la adaptación, ¿cómo el ser humano logra vivir en lugares tan extremos? También se podría preguntar si se les ocurren otros lugares extremos del mundo donde el humano se ha instalado, por ejemplo, en islas remotas, en lo alto de montañas o incluso en la estación espacial internacional. A donde sea que vayamos, los seres humanos podremos vivir bien siempre y cuando trabajemos en nuestra resiliencia.

REFERENCIAS 

• Aradas, A. (2013). Antártica: ¿cómo se vive en una de las zonas más remotas del mundo? Recuperado de BBC [02 de febrero de 2023].
• Larrondol, P. (2018). La Antártica se queda sin niños chilenos luego de 33 años por el cierre de la escuela en Villa Las Estrellas. Recuperado de Emol [02 de febrero de 2023].

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